Home »
Éste año primero que nada descubrí el amor por mí, la importancia de una vida sana y activa y de ser abierta conmigo misma, de no callar las cosas que me atormentan, enfrentar todos mis miedos y trazar un objetivo muy claro: ¡vencerlos! Enfrentar muchos de mis miedos ha sido una travesía para nada sencilla, pero que me ha dado satisfacciones inmensas. Aprendí a confiar no sólo en mí sino en los seres queridos que me rodean, ellos han sido un punto clave en mi lucha contra el sobrepeso, y valores como la honestidad y valentía han sido el puente entre ambas cosas, ser honesto y valiente te abre un sinnúmero de puertas y confiar en tus amigos y familia estando en la lucha te da una fortaleza y una motivación inexplicable.
Hace un año les compartí una fotografía de la navidad con mis primas, éste año también lo quiero hacer y aquí ésta. Ésta es la fotografía que ya les había compartido el año pasado, para los que no me conocen de ése tiempo soy o bueno ERA la de en medio, la de los rizos rubios jajaja
Y ésta es la fotografía de éste año, de la Nana que ahora soy (la de la chaqueta de cuero):
Si bien no se nota mucho la diferencia del peso y las medidas que los 10kg que he reducido me han hecho dejar atrás, yo si la noto en mí, desde en el tipo de ropa que usaba antes hasta en mi semblante, en la manera en la que resalto y ya no me escondo tras mis primas y tras mis rizos llamativos. Todo es muy diferente ahora.
Estoy muy decidida a seguir avanzando, a lo mejor no a pasos agigantados como al principio, pero definitivamente no quedarme estancada ni desvanecerme hasta regresar al punto de partida, esa ya había sido una promesa del año pasado, promesa que para nada volveré a hacer porque sigue vigente. Éste año vuelvo al Insanity, quizás hasta me aventure en el Crossfit, quien sabe, todo puede suceder cuando estas motivado ;D
Me encantaría que a razón de mi experiencia muchas de ustedes personitas que leen éste tipo de blogs y no se han decidido a empezar LO HAGAN, créanme, así empezamos much@s de los que estamos aquí, viendo como los demás se movían y nosotros no hacíamos nada. Es normal sentir culpa o vergüenza, sentir miedo a lo que vendrá, pero el miedo sólo dura un poquito al principio y después ya ni sabes que es.
Con la tecnología de Blogger.